Desde el primer día de curso nos dijeron que los alumnos de Grado Superior, al igual que los universitarios, también teníamos derecho a disfrutar de una beca Erasmus, y justo desde ese día fue mi único objetivo durante los dos cursos:
Hacer lo posible para ir a ITALIA.
Además de estudiar Transporte y Logística llevaba (y continúo estudiando) varios años estudiando italiano para algún día cumplir un sueño que es vivir allí. Mi experiencia en la FCT fue inmejorable. Una asesoría especializada en transporte internacional, cuyo mercado mayoritario era Latinoamérica. Fue un gran beneficio mutuo para la empresa y para mí, ya que contaba con español e italiano a un buen nivel y, a veces, también se hablaba inglés.
Casi el 100% del contenido que utilicé para trabajar lo había estudiado durante el curso, sentí que era la empresa perfecta para practicar con todos los documentos estudiados según los distintos medios de transporte, etc.
En cuanto a la ciudad, Bolonia, una ciudad ni muy grande ni muy pequeña pero preciosa. Situada en una gran posición para viajar a grandes ciudades de Italia en muy poco tiempo y muy económico (aunque la vida en Bolonia no es nada barata). He conocido a mucha gente increíble y es lo mejor de participar en este tipo de experiencias. Lo recomiendo al 100% sin dudarlo. Repetiría seguro.
Arrivederci!
Francisco Javier Sánchez Jorquera
Ciclo formativo de grado superior Transporte y Logística
Prácticas de FCT en Bologna septiembre-diciembre 2019
Irme a Manchester no fue una decisión fácil. Quería formarme dentro de un departamento de comunicación de un club deportivo y eso fue lo que busqué para acabar dando con el equipo que me acogió, el ‘Manchester Futsal Club’ con el que trabajé durante los 3 meses establecidos principalmente con su equipo femenino, pero también con su equipo masculino y con la escuela del propio club en la ciudad de Manchester. Salir a otro país es complicado a priori, y los primeros días puede resultar duro, pero al final, una vez te acostumbras al país, a la gente, al idioma, a la cultura y, en general, al entorno, todo es mucho más fácil. En mi caso, tuve la gran suerte de toparme con personas extraordinarias con las que conservo el contacto aún a día de hoy.
En definitiva, para mí, la experiencia fue gratificante y, aunque en un principio no confiaba mucho, volvería a repetir sin dudarlo.
Francisco Javier Rodríguez Martínez
Ciclo de grado superior de Marketing y Publicidad
Prácticas en Manchester 2019
Erasmus: La mili del siglo XXI
3 años siguiendo la meta de terminar mi FP fuera de la frontera. Aprender mi vocación viajando. Nuevas vistas, nuevo idioma, nuevas personas, nuevas culturas, nuevas experiencias. Parecía tan lejano… Y ya está.
Lo conseguí.
Recuerdo que mi tutora me contaba que debería salir hacia Praga el sábado, que el lunes 11 de marzo empezábamos las prácticas y que “será mejor que me haga a mi casa temporal cuanto antes”. Mientras leía los correos, todo parecía un sueño. ¿Estaba ocurriendo de verdad? Creía que no llegaría, pero ahí estaba yo, mirando vuelos, escogiendo maletas, vaciando mi armario en la cama. Puedo ver cómo me asaltaban mil preguntas, y la mayoría me preocupaban poco. En mi cabeza sonaba “A million dreams” de la banda sonora de The greatest showman, porque en ese momento mis sueños estaban a menos de una semana que comenzar.
La beca Erasmus… Alguna vez pensaste en ella, ¿verdad? Hay quienes sueñan con ella, con alcanzarla, coger el petate y largarse, y yo era una de ellas. Un nuevo país, gente de todas partes, fiesta, cultura, gastronomía, libertad… Todo un despertar para tus sentidos. Pero, ¿está hecha para ti? Por lo pronto, el título de este artículo puede sonar algo duro, pero creedme que no estoy tan equivocada.
Te voy a contar lo que he aprendido gracias a esta experiencia. Tal vez al terminar este artículo tengas seguro que quieres salir y vivir esta increíble oportunidad como muchos desde 1987 hemos hecho, o incluso puede que decidas que definitivamente no te atrae la idea. La cuestión es que de alguna manera me gustaría servirte de inspiración, guía y sobretodo, ayuda. Aunque ya hablaremos de las conclusiones más adelante.
No te voy a mentir. De hecho, quiero ser lo más realista contigo. No quiero venderte una idea y que luego sea otra.
ES. MUY. DURO.
Llegas tú y toda la ilusión del mundo a un país desconocido y completamente solo. Bajas del avión y vas hasta tu zulo temporal creyendo que sabes lo que vas a vivir y lo que vas a adquirir en estos meses, pero no tienes ni idea. Vas a nada más y nada menos que aprender a vivir a base de ostias, y por supuesto, eso no te lo dicen. Al menos… no así. La emoción te nubla la mirada y tu mini-tú interno te ensordece con sus ganas de que mañana mismo cojas el avión y te vayas, y cuando te advierten de lo que realmente es un Erasmus no te estás enterando a lo que estas accediendo. Así que… que no te engañen y sobretodo… no te engañes.
Cuando vas de Erasmus, aprendes muchas cosas. Aprendes a ahorrar, a aguantar, a estar solo… Entiendes lo mucho que necesitas a tu familia, amigos, y echas muchísimo de menos cosas que a lo mejor en la rutina incluso odiabas. El cocido de tu madre está más bueno ahora que no puedes comerlo, y las verduras no están tan malas cuando no te queda mucha cosa en el frigo. Y qué vergüenza cuando le preguntaste a un dependiente algo y no supo contestarte porque no te entendía. ¿Esto es agua con gas? ¿Aquí no beben agua normal? Vaya… resulta que esto es lo que sienten los guiris en España cuando les hablamos más alto en español y siguen sin entendernos… Todo está mal. A veces puede que creas que te has equivocado, que no tendrías que haber venido. “¿Qué necesidad tengo de vivir esto, con lo fácil que habría sido quedarme en España?”.
Pero… también aprendes a hacer amigos. Aprendes cosas de los lugares que visitas y la gente que conoces como culturas, comidas, e historia. Aprendes a cocinar, y a reírte de ti mismo cuando algo sale mal. Pierdes la vergüenza, y ganas en educación. Aprendes a sonreír a pesar de todo, y a mirar el lado de las cosas. Aprendes a decir: no, esto no me va a amargar el día. Aprendes a que perderse no es el fin del mundo, y que incluso has encontrado una tienda local muy chula gracias a eso. Aprendes a valorar lo que tienes en España, y entiendes mejor tu propia cultura. Aprendes de ti, y entiendes cosas de ti mismo que antes no veías. Te haces más fuerte, más maduro. Dejas atrás una parte de ti que (si quieres) podemos llamarla la “mimada”. Dejas de estar bajo la mirada de tus padres para estar bajo tu propio criterio, tus propias normas, tus propias decisiones. Y aprendes tanto que… “cuando te vas, eres estudiante. Pero cuando vuelves, eres persona.” ?
Así que sí. Es duro. Pero nadie dijo que era fácil. La frase sería que “no es un camino de rosas”, pero… Cuando vas cruzando por este camino, tienes partes que pinchan y partes que están bien, pero cuando sales y miras atrás puedes ver que has cruzado un rosal precioso. Puede que sí sea un camino de rosas, pero no el que tú piensas.
Puede que llegues tu primer día, hagas la compra con la esperanza de aprender a cocinar como un autentico realfooder, finalmente sintiéndote de lo más pardillo del mundo mirando etiquetas sin entender ni jota y comprando paquetes industriales de pasta. Puede que se te rompa una botella de aceite virgen extra español (con lo que te ha costado encontrarlo) y se te rompa en medio de la calle, se te llenen las bolsas de aceite, y cuando crees que no puede ir peor empieza a llover. Puede que creas que vas a hacer amigos, o que vas a estar más solo que la una, y al final te sorprendas (pasa, os lo juro. En cualquier caso pasa). Puede que llegues a tu residencia, te presenten a tus compañeros de cuarto y pienses que vais a ser grandes amigos, y acabes en el cuarto de baño llorando porque te sientes solo. Puede que tu compañero de cuarto sea un borde de cuidado, un guarro, o un encanto. Puede que pienses que nada puede sacarte una sonrisa, que todo es una mierda, y un perrito sonriendo en los brazos de su dueño en el metro lo consiga. Puede que creas que por fin tienes un buen día y el cajero del súper te hable mal y te arruine el día. Puede que te pierdas, no encuentres el tren que tienes que coger y encima no encuentres a nadie que hable un idioma que conoces, pero incluso sin saber cómo ayudarte, alguien decide ayudarte, buscan si alguien puede y al final todo sale bien. Puede que creas que ese lugar no es el tuyo cada dos por tres, hasta que haces turismo y ves las maravillas de tu ciudad. O puede que creas que has nacido para ir a una ciudad de clima frío, y luego resulte que eres más murciano de lo que pensabas. Puede que no quieras conocer españoles, y al final hacéis piña y os lo pasáis pipa. O puede que conozcas nativos y gente de otros países que os hagan enamoraros de la experiencia…
Pase lo que pase, cuando vuelvas, desearás haber tenido más tiempo, o incluso quedarte si te ha gustado mucho el país. Tendrás ese sabor agridulce que combina el “home sweet home” con el “me faltó por ver x sitio”. Y sobretodo tendrás un montón de recuerdos, anécdotas y experiencias increíbles que te habrán convertido en la persona que eres.
Así que… no te cortes, no te desanimes, no desistas. Estudia, aprueba, aprende, y viaja. Fija tus metas y ve a por ellas. La experiencia Erasmus es una de las mejores maneras que he conocido de aprender a vivir.
Que… ¿si está hecho para ti?
Eso lo elijes tú. Pero en mi opinión… debería ser asignatura obligatoria.
Alejandra Baño Pagán
Ciclo de grado medio Video Disc Jockey y Sonido.
IES Ramón y Cajal
FCT en la República Checa
Fadwa Mazari. Asistencia a la dirección bilingüe.
Prácticas FCT en Berlín. 2018.
“El viajar mata los prejuicios y elimina la ignorancia. Por ello un criterio amplio de la gente y la vida nunca será alcanzable si nos sentamos en nuestro propio rincón del mundo.” Mark Twain.
José Antonio Hita Carmona. Asistencia a la dirección bilingüe.
Prácticas FCT en Cork.
Decidí hacer las prácticas en el extranjero para perfeccionar mi inglés y poder abrirme puertas en un entorno internacional de cara al futuro. Al principio todo fue un caos, tenía que encontrar unas prácticas y alojamiento, como veis en la foto elegí Holanda y por si alguien está pensando en venir aquí mi mensaje es: parece imposible, pero no lo es. En este país el alojamiento es una carrera de obstáculos constante con unos precios que ni el mismísimo Hollywood, pero con paciencia y con mil millones de apps de habitaciones se puede conseguir una sitio por un precio “razonable”.
Mi experiencia en general está siendo mucho mejor de lo que esperaba, (aún sigo aquí porque decidí hacer unas prácticas más largas) trabajo con gente de todos los países del mundo y en una estructura nada parecida a lo que acostumbramos en España. En mi empresa no hay paredes, no hay despachos, tan solo una sala de reuniones acristalada por lo que nunca he tenido que pasar por el trago de “ir al despacho del jefe”. La comunicación es algo que aquí valoran por encima de todo y se hace imprescindible para poder trabajar en equipo. Yo, sinceramente, nunca me he caracterizado por ser una persona con el don de la comunicación y durante este tiempo he aprendido a comunicarme de una manera eficiente para conseguir mejores resultados y que eso obviamente se viese reflejado en mi trabajo. En estos meses he aprendido absolutamente de todo, desde B2B pasando por linkbuilding y estrategias de comunicación, redes sociales, SEO, atención al cliente y un largo etcétera. Poco a poco he ido adquiriendo más responsabilidades y con ello más conocimientos en cada una de las áreas. Los workshops que nos han dado en mi empresa han sido realmente útiles y considero que mi formación es mucho más completa después de esta experiencia. Por supuesto no me arrepiento en absoluto de haber tomado esta decisión y de momento no tengo pensado volverme, Amsterdam es una ciudad que enamora.
Para concluir me gustaría decir que un grado superior es una formación completa, que yo estoy haciendo lo mismo que gente con carrera, con máster, con bachiller e incluso algunos sin bachiller. Si hay algo que realmente te gusta, se nota, y simplemente con dedicación y esfuerzo puedes llegar a donde te propongas. Si alguien lee esto y está con la duda, hazlo, porque te aseguro que no te vas a arrepentir. Doei!
María Garrido – Prácticas en Online Marketing.
Yo José Ángel, alumno de CIFP Carlos III, estoy desarrollando mis conocimientos aprendidos durante 2 años en la capital de Hungría (Budapest). Gracias al centro por ayudarme a través del proyecto Erasmus+, puedo disfrutar de vivir una experiencia única que pasa una vez en la vida. Este tipo de proyectos son los que “sin duda alguna”, nos ayudan a marcarnos un camino en el mundo laboral globalizado en el cual vivimos hoy en día.
José Ángel López Pelegrín.
To begin with , I would like to thank CIFP Carlos III, its team and also Erasmus+ programs for giving me the opportunity on taking part of this experience.
My stay in Belgium was a one time opportunity experience which I would definitely do again. I got to know a different culture and also learned how to communicate and live in a different environment. I really enjoyed working in the company which I found, DB Schenker, due to the fact that working for the Export team was such a nice and peaceful environment , I could say that I was very lucky to find such team. One of the best memories that I’m taking with me is that I got the opportunity to go to the annual event which DB Schenker holds, this time it was in Germany, which I also was lucky to be part of their football tournament.
I learned so much working for such company and also the fact of leaving abroad, thanks to this I really feel that I have grown both personal and professionally. Being able to participate in such program, like Erasmus+, gives you the opportunity to learn, grow and find out what you are really worth and capable of.
If you have the smallest chance of being able to be part of Erasmus+ and going abroad to do your internship , don’t even think about it twice!! Just do it!!
Ana Zamora Sánchez, prácticas como titulada en el ciclo de grado superior de Marketing y Publicidad
Juan Pedro Cañavate Bernal. prácticas de FCT para el ciclo de grado superior de Asistencia a la Dirección Bilingüe
Imane Daoudi, prácticas de FCT para el ciclo de grado superior de Comercio Internacional Bilingüe
Al principio estaba como un poco fuera de lugar porque era un sitio nuevo al que no conocía de nada. Me acostumbré muy rápido, como en una semana. Y terminé yendo de un lugar a otro para investigar cosas nuevas de la ciudad, No había investigado nada por internet así que todo era nuevo para mí. Hasta llegué a visitar pueblos cercanos a Ámsterdam para explorar más. Lo único que me pareció complicado fue buscar alojamiento, pero por lo demás repetiría la experiencia de hacer un Erasmus. Además la gente de Holanda es muy agradable, y siempre están dispuestos a ayudar
Víctor Sánchez Martínez
Ciclo de grado superior Desarrollo de Aplicaciones Web
Prácticas en Ámsterdam 2019
Poder realizar mis prácticas en el extranjero ha sido una experiencia increíble e inolvidable.
Mi estancia en Londres no solo ha sido una oportunidad para formar parte de una empresa extranjera, sino para poder conocer una decena de culturas y poder sumergirme en un ambiente internacional como mi grado educativo exige.
Si tuviera la oportunidad repetiría sin dudarlo.
¡Además el tiempo se portó muy bien conmigo!
Michael Andrés Ángel Alcívar.
Comercio internacional bilingüe.
Prácticas FCT en Londres.
El año pasado terminé el ciclo superior de DAM (desarrollo de aplicaciones multiplataforma) en Caravaca y tras las prácticas en Murcia, después de mucho meditar si continuar en el mundo laboral o hacer otra cosa, al final me decanté por hacer el ciclo superior de DAW (desarrollo de aplicaciones web) en el CIFP Carlos III.
Unos de los motivos principales que me impulsaron a hacer el ciclo en Cartagena fue el querer hacer las prácticas en el extranjero, no podía dejar pasar la oportunidad.
Desde siempre me ha encantado salir fuera de mi burbuja de confort para conocer nuevas personas y distintas culturas e idiomas y es por ello que ya había estado previamente antes de hacer las prácticas de trabajo en Polonia en Bélgica, Alemania, Hungría, Rumanía y Finlandia.
Cuando fui seleccionado para hacer las prácticas con ayuda de la beca Erasmus+ intenté por mi cuenta buscar una empresa en Alemania pero debido a los exámenes finales y al poco tiempo del que dispuse no encontré ninguna, así que finalmente el centro me propuso hacer las prácticas en Portugal, Inglaterra o Polonia.
La causa de mi elección de Polonia no la tengo clara ni yo, seguramente se debiera a que Polonia es un país limítrofe con Alemania y me gustaría acabar trabajando allí más pronto que tarde, en cualquier caso no me arrepiento de la decisión.
En mi estancia en Polonia, visité Varsovia dos ocasiones y también visitamos algunos pueblos cercanos a Cracovia.
Cracovia está dividida en el casco antiguo que ocupa toda la parte central de la ciudad. Por ella no se permite el acceso al tranvía ni vehículos a motor (a excepción de ambulancias y coches de policía) convirtiendo toda la zona en un espacio ideal y precioso dar un paseo, ir a tomar unas cervezas, a cenar y visitar lugares mágicos como el castillo de Wawel, la basílica de María, la torre del Ayuntamiento, el museo subterráneo, etc.
La historia de la ciudad es muy graciosa, trata sobre un malvado dragón, una princesa, el río Vístula y el ingenio de un campesino, te invito a buscarla que seguro que te asombrará, es por ello que el logotipo de la ciudad es un dragón.
Cracovia al ser la segunda ciudad más grande de Polonia y la ciudad favorita para los estudiantes es una ciudad completamente joven y multicultural, el idioma dominante es el inglés por lo que no me fue ningún problema comunicarme con casi cualquier persona, de hecho, encontraba con bastante asiduidad a gente que hablaba castellano.
Lo bueno de vivir en grandes ciudades es que rápidamente te acostumbras del ritmo de vida y al ser una ciudad tan viva siempre puedes encontrar cosas para hacer como: conciertos, ponencias, monologos, quedadas para practicar X idioma o simplemente para conocer personas por no hablar de la famosa mina de sal, la fábrica de Schindler, el set de rodaje de la película de ‘La lista de Schindler’ de Spielberg y por supuesto, como no olvidar, el campo de concentración de Auschwitz.
Mi recomendación final es que si tienes la oportunidad de hacer las prácticas en otro pais ni te lo pienses, al final, donde vayas es lo de menos.
Es de lo mejor que puedes hacer para abrir la mente, mejorar el inglés, aprender algo del idioma local y… ¿quien sabe?, igual te quedas allí permanentemente.
Lo pasarás mejor o peor pero la experiencia de esos tres meses te garantizo que será única. ?
Do widzenia!
Jesús Valera Reales.
Sept-Dic 2017. BOLOGNA (ITALIA)
Bolonia es una ciudad preciosa, llena de vida, de fiesta, de estudiantes de todo el mundo, con una gastronomía exquisita y unos vinos excelentes.
Lo más emblemático de Bolonia son las “Due Torri” (Las Dos Torres). En la Edad Media, las familias más ricas construían torres como símbolo de poder y riqueza, a la par que valían para defenderse y controlar al enemigo. Hoy día solo quedan estas dos torres, Garisenda y Asinelli, conocidas comúnmente como las Gemelas. Una de ellas, la más baja, sufre una fuerte inclinación debido al hundimiento de la tierra.
También comentar de Bolonia que posee la universidad más antigua de Europa, la cual tuve la suerte de visitar.
Mi experiencia en la empresa de marketing donde realicé mis prácticas, ha sido muy positiva: he podido realizar diferentes tareas en distintos departamentos de la agencia. Además mi jefa (que hablaba español y era una enamorada de nuestro país) y mis compañeros, fueron muy acogedores y me hicieron sentir cómoda en todo momento. Otro punto positivo, ha sido el poder aprender otro idioma, el italiano.
Por otro lado, he tenido la oportunidad de conocer gran parte del norte de Italia, ciudades tan bonitas como Venezia, Florencia o Milano.
Ha sido muy enriquecedor tener la posibilidad de disfrutar de una beca Erasmus+ y conocer otro país y otra cultura. ¡Lo recomiendo a todo estudiante!
Saluti a tutti!
Arrivederci!
Mª del Mar Hernández Oliva. Grado Superior Administración y Finanzas a distancia.
No sólo aprendes idiomas y nuevas costumbres, sino que disfrutas de cada segundo, ya que sabes que es una oportunidad única. Sin duda, si tenéis la oportunidad, coged la beca Erasmus.